¿A dónde te lleva tu dolor?
Irónicamente, la respuesta no es a tu médico. El hecho que sintamos tristeza, desesperación, estrés, sufrimiento, nos convierte en seres humanos. El dolor, la pérdida, los problemas son parte de la experiencia vital del ser, así como la felicidad, el amor y la alegría.

Las preguntas clave son: cómo esto te ayudará a evolucionar, qué destrezas activarás para superar esa situación, qué aprendizajes obtienes de esto, qué descubres sobre ti mismo que no conocías antes, quién camina junto a ti en este trayecto.

Si lo enfrentamos como un desafío, una experiencia de crecimiento y como una nueva lección de la vida, nuestra actitud será constructiva, nos ayudará a aceptarlo como es, o a trabajar hacia la solución si es posible. Puede que no tengamos control sobre todo lo que sucede a nuestro alrededor, pero sí controlamos nuestras reacciones y qué hacemos con ellas.

«El verdadero autodescubrimiento comienza donde termina tu zona de confort». Adam Braun